La proliferación de agentes de origen fúngico, como la infección por hongos, se produce en los almendros a finales del invierno y comienzo de la primavera en unas condiciones específicas de alta humedad ambiental y suaves temperaturas. Para prevenirlo y asegurarnos de que nuestra cosecha no sufre ningún daño, te mostramos el mejor tratamiento almendros para el invierno.
Consejos para cuidar tus almendros durante el invierno
Aprovechando este momento en que las hojas de los árboles están totalmente caídas, es muy recomendable que utilices tratamientos fitosanitarios destinados a prevenir y eliminar ciertos patógenos que pueden echar a perder no solo tu cosecha, sino también tus árboles.
En primer lugar, tendrás que comenzar con una estrategia para controlar las enfermedades provocadas por hongos, monilia, chancros … Pero antes de aplicar a tu cosecha cualquier fungicida, te aconsejamos que tomes medidas de ayuda para su prevención. Entre ellas, destacamos las siguientes:
- Seleccionar variedades de almendros resistentes a los hongos.
- Destruir los restos de los árboles afectados por alguna enfermedad y evitar contagios.
- Realizar un control fitosanitario en especies susceptibles todos los años y en condiciones climáticas favorables.
- Usar el abono de manera moderada para evitar el exceso de frondosidad.
- Podarlos para facilitar su oxigenación.
Aun así, si necesitas realizar cualquier tratamiento almendros, debes evitar hacerlo los días con temperaturas inferiores a los 5ºC ni con mucha humedad. En el caso de que utilices oxicloruro de cobre, debes tener en cuenta que provoca un efecto fitotóxico sobre el cultivo, por lo que tendrás que esperar a realizarlo antes de la apertura de las flores, es decir, con el engrosamiento de las yemas, y asegurarnos de que no llueva 24 horas después de su aplicación.
También debes seguir estos otros consejos: utilizar productos autorizados y, en caso de que mezcles varios de ellos, lee las etiquetas del envase muy bien y evita incompatibilidades. Por último, respeta siempre los plazos de seguridad de cada producto que utilices.